En el último mes se han emitido tres sentencias condenan al Estado en casos de abuso sexual en escuelas y en las que se obliga a la reparación del daño y dar garantías de no repetición.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) deberá tomar acciones al respecto, así como ante los 18 casos documentados por ONG con casi un centenar de niños como víctimas.
Ante lo delicado del tema, nos hacen ver, la SEP, y su titular Delfina Gómez, no se han pronunciado, al menos para ofrecer algunas garantías de que estas prácticas no se repetirán y que las sentencias serán acatadas puntualmente.
Quizá, nos dicen, las prioridades de doña Delfina estén en otro lado.