La noche de este jueves, un hombre agredió de un balazo a su esposa en el restaurante Suntory, ubicado en la calle Torres Adalid 14, colonia Del Valle, en la alcaldía Benito Juárez.
El conocido restaurante estaba lleno de policías y se reportó una fuerte movilización policial en la zona. Después de conoció que la mujer agredida murió y fue identificada como Yrma Lydia, cantante de música mexicana.
Ante este suceso, un ciudadano fue testigo del momento de la agresión. «Al momento de la agresión, una escolta que venía con la persona que me cité para comer lo detuvo».
«Primero se escuchó un golpe seco, sí parecía un disparo, pero como nadie se movió. Me llamó la atención que los comensales voltearon hacia la pesera, que es como un salón privado dentro del sitio. Posteriormente se escuchó otro golpe seco y como ya sabíamos de dónde venía el ruido, vimos que una chica estaba sentada y comenzó a mecer en círculos, estaba gravemente herida y el señor que estaba con ella se paró y con el arma que ya tenía en la mano le disparó en la cabeza y la chica quedo recostada en la silla», relató Gabriel, testigo del hecho, en una entrevista.
Asimismo, dijo que al lugar llegó otro hombre a auxiliar al agresor. «El señor que agredió a la mujer fue auxiliado por otra persona, un pelón de lentes, que aparentemente venía con él. Salió corriendo este pelón y luego regresó por él, creímos que quizá se llevó el arma», dijo.
Por ello, Gabriel detalló que, con la persona que venía acompañada le llamó a su escolta para ayudar. «La persona con la que yo venía salió a gritarle a un elemento de seguridad y le comentó lo que había sucedido. Entró, lo sometió y lo quiso ayudar el otro pelón que lo estaba auxiliando y nos metimos para que no lo dejaran ir».
«Salimos a la puerta principal y vimos pasar a una patrulla, le llamamos y se detuvo. Los policías estaban completamente aturdidos, porque no sabían qué pasaba», agregó
De igual manera, Gabriel detalló que al entrar a ver cómo estaba la mujer, ya no presentaba signos vitales. «La quisimos ayudar, pero ya no reaccionó».
Por su parte narró la falta de coordinación de los elementos policiales. «Un relajo los protocolos, adentro pelándose los PBI con los del sector, por la custodia del lugar. Terrible la forma en como reaccionaron»
«Cuando hubo el segundo y el tercer disparo sí hubo un corredero de gente, porque el primero pensaban que era un traste caído. El lugar estaba lleno a más de la mitad de su capacidad», añadió.
Sin embargo, reveló que el agresor «le ofreció dinero al policía bancario para que lo dejaran ir, pero los policías que llegaron se hicieron cargo de la situación».
Finalmente, Gabriel detalló lo que había sobre la mesa de la agresión. «Notamos que había anotaciones en la mesa, como que estuvieron un buen rato. La chava estaba tomando una copa de vino o algo rojo y sobre la mesa estaban anotaciones, en una hoja había muchos rayones en círculos y del otro lado, la chica hizo unas anotaciones como de temas de salud, de revisión de sangre de diabetes».
«La mujer era muy joven, como de unos 30 años y el señor ya se veía grande», concluyó.