Su suerte estaba en suspenso: los corgis adorados de la reina Isabel II, perros inseparables de la soberana muerta el jueves a los 96 años, encontraron por fin un hogar: el de su hijo, el príncipe Andrés.
Príncipe Andrés tendrá a los corgis
Un portavoz del príncipe Andrés, tercer hijo de la reina, y de su exesposa la duquesa de York Sarah, anunció el domingo que se encargarían de Muick y Sandy, los dos corgis que sobrevivieron a la reina.
Andrés es a veces presentado como el “hijo preferido” de la reina, pero se ha replegado de la monarquía tras acusaciones de agresiones sexuales en Estados Unidos, a las que puso fin pagando millones de dólares.
Fue él quien regaló a su madre los pequeños cachorros. Muick y Sandy, últimos representantes de los más de 30 corgis que tuvo, la acompañaron durante la pandemia, según la encargada de su vestimenta, Angela Kelly.
Muick llegó a Windsor a inicios de 2021 para acompañar a la reina, entonces confinada como todos los británicos, con otro cachorro llamado Fergus.
Fergus falleció semanas más tarde a la edad de cinco meses, en los tiempos sombríos posteriores a la muerte de su esposo el príncipe Felipe.
Para reemplazarlo Andrés y sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia, ofrecieron a Isabel II el pequeño Sandy con motivo de su 95 cumpleaños.