Cuatro integrantes de una familia francesa adinerada, que estaba obsesionada con las teorías de la conspiración sobre el Covid-19, murieron al saltar desde el balcón de su departamento, ubicado en el séptimo piso, en la localidad suiza de Montreux.
Los hechos ocurrieron el pasado 24 de marzo, pero hasta ahora era un misterio lo ocurrido; sin embargo, la policía regional de Vaud dijo este martes que trabaja en una teoría de “suicidio colectivo”, con pruebas de que “todas las víctimas saltaron del balcón una tras otra”.
Los cinco miembros de la familia se habían “retirado de la sociedad” y saltaron hasta morir momentos después de que la policía intentara ejecutar una orden de arresto contra el padre por su decisión de educar a uno de sus hijos en casa, dijo la policía.
Eric David, de 40 años; su esposa Nasrine Feraoun, de 41; y la hermana gemela de ésta, Narjisse, así como la hija del matrimonio, de ocho años, fueron encontrados muertos al pie del edificio, cerca del famoso Casino de Montreux.
Un joven de 15 años, también hijo de la pareja, sobrevivió pero se encuentra en estado de coma en un hospital.
La policía explicó que tocó a la puerta del departamento a las 06:15 horas y que una voz desde adentro preguntó quién era, pero una vez que se identificaron, todo quedó en silencio. Finalmente, los oficiales se fueron.
Poco después de las 07:00 horas, los cinco miembros de la familia saltaron desde el balcón, con cinco minutos de diferencia entre uno y otro.
De acuerdo con el diario suizo Le Temps, la familia vivía prácticamente en un régimen de autosuficiencia, con una reserva bien organizada de diversos alimentos que ocupaba la mayor parte del espacio del apartamento.
Sólo la hermana gemela de la madre trabajaba fuera de casa, mientras que ni la madre ni la niña de ocho años, que no iba a la escuela, estaban registradas ante las autoridades locales. El padre trabajaba desde casa.
En un comunicado, la policía señaló que “todos estos elementos sugieren. el temor a que las autoridades se inmiscuyeran en sus vidas”. Los vecinos dijeron que la familia era tranquila y reservada.
Todos los miembros de la familia eran ciudadanos franceses que vivían en Suiza desde hace tiempo.
Según el diario francés Journal du Dimanche, las gemelas eran nietas del novelista argelino Mouloud Feraoun, asesinado en 1962.