Morena y sus aliados parcharon ayer en el llamado «Plan B» electoral, que ordena una poda administrativa al Instituto Nacional Electoral (INE).
En las sesiones de comisiones en el Senado eliminaron las modificaciones que garantizaban fondos y votos para la sobrevivencia de partidos minoritarios, como el PT y el PVEM, pero dejaron intactas otras medidas que afectan la operación del INE.
Las minutas fueron aprobadas por las comisiones de Gobernación y Estudios Legislativos, por lo que serán turnadas hoy al pleno del Senado, donde Morena y sus aliados del PT, PVEM y PES contarían con los votos necesarios para avalar las reformas secundarias.
Líderes de la oposición llamaron a la ciudadanía a movilizarse para impedir que se consume la aprobación en el pleno.
Las bancadas del PAN, PRI, MC, PRD y GrupoPlural exigieron en vano al coordinador de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política, RicardoMonreal, que la discusión del paquete electoral se postergara hasta el nuevo periodo ordinario de febrero.
«Pedimos que la sociedad presione a Morena», planteó el jefe de MC, Clemente Castañeda. «Las consecuencias pueden ser catastróficas».
Por el Grupo Plural, EmilioÁlvarezIcaza invitó a manifestarse pacíficamente en contra para rechazar el «golpe a la democracia» que se perfila en los próximos días. «La ruta que sigue es hacer un llamado de ‘no al golpe», sostuvo.
Si las reformas pasan en el Senado deberán ser devueltas a la Cámara de Diputados. El periodo ordinario de sesiones concluye a la medianoche del jueves próximo.