El matrimonio de Emilio Lozoya y Marielle Helen Eckes llegó a su fin.
Él preso en el Reclusorio Norte y ella evadida de la justicia en Alemania, su país, acordaron el divorcio el pasado 7 de abril en Alemania, a través de un apoderado legal del ex director de Pemex, tras 17 años de unión.
La disolución del vínculo fue dado a conocer ayer en una audiencia en la que el acusado del Caso Odebrecht pretendía que le concedieran la libertad provisional y el juez de control dijo que por el momento estaba impedido para pronunciarse.
Alejandro Rojas Pruneda, abogado del ex funcionario, en principio ofreció dos pruebas para justificar el cambio de medida cautelar y uno de ellos era un documento de cuartilla y media en el que únicamente se informa que hace 8 meses se formalizó el divorcio en Alemania.
El trámite se concretó en ese país porque fue allí donde la pareja tuvo el último domicilio conyugal, desde fines del sexenio pasado, justo cuando empezaron las investigaciones de los Casos Odebrecht y Agronitrogenados.
Los fiscales federales de inmediato cuestionaron el texto original porque estaba en alemán, además de que manifestaron su desconfianza de la traducción al español incluida como anexo; dijeron que era necesario hacer actos de investigación como una solicitud de asistencia jurídica para verificar la autenticidad y su posterior traducción.
«Si bien hace referencia a la existencia de un expediente de divorcio, no tenemos el expediente completo. El documento dice que no aplica a pensiones, suponemos que pensiones alimenticias, por lo tanto ¿cómo es posible que diga el documento que no hay compensaciones alimenticias? Existen además bienes afectos en un divorcio«, cuestionó el fiscal Kristian Javier Jiménez Hernández.
Rojas respondió que esta audiencia no era el espacio apropiado para dirimir un tema relacionado con los hijos de Lozoya, derivado del divorcio.
La ahora ex esposa de Lozoya pertenece a la familia propietaria de la compañía alemana Eckes-Granini, líder en el mercado de los jugos procesados en Europa. Ella, de hecho, era conocida como la «heredera Granini».
En febrero de 2016 Lozoya y Eckes se casaron por lo civil en una discreta ceremonia en el Centro Histórico de la Ciudad de México, de acuerdo con la revista Quién.
Cuando la Fiscalía General de la República ejerció la acción penal contra Lozoya, no sólo fue contra él sino también contra su madre, su hermana y su esposa.
Lozoya fue detenido en España en febrero de 2020 y extraditado a México cinco meses más tarde; aunque gozó de la libertad provisional, el 3 de noviembre de 2021 le modificaron la medida cautelar y terminó en el Reclusorio Norte, donde a la fecha permanece procesado por asociación delictuosa, lavado de dinero y cohecho derivado del Caso Odebrecht.
En tanto, contra Eckes se libraron dos órdenes de aprehensión, una por una presunta defraudación fiscal de 909 mil 400 pesos y otra por los delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero, relacionada con el mismo caso de los sobornos de la constructora brasileña a su ahora ex marido.