El Tren Maya registró este martes un percance de vía en el Tramo Tres, a la altura del Pueblo Mágico de Izamal, y no un descarrilamiento; además no hubo personas lesionadas según reportó Óscar David Lozano Águila, director del medio de transporte.
«Antes de entrar a vía, los garroteros toman una fotografía y verifican que el tren esté en posición. Los aparatos de cambio de vía se mueven de forma automatizada desde el centro de control. Le indican a la conductora que avance, y ella entra con su tren. Intempestivamente cuando pasa el segundo bogie del coche número 3, el aparato cambia de posición completamente. Es una anomalía que tenemos que analizar, no debería haber pasado», explicó en la conferencia matutina.
Los trenes 307 y 306 estuvieron involucrados en el percance, pero afortunadamente ninguno de los pasajeros resultó lesionado.
«El bogie número dos es el que sale de la vía, eso es un percance porque solamente es un bogie que sale queda ligeramente, por eso es que se ve inclinado y el tren este el coche número cuatro queda sobre la vía 2 completamente, no sale de la vía», detalló.
El suceso generó una intensa respuesta por parte de los equipos de emergencia, los cuales aplicaron los protocolos de emergencia correspondientes.
“Entonces si ustedes se fijan en la fotografía, la posición se pone completamente a la izquierda, ambas agujas y entonces se pone en posición desviada y es lo que provoca que el coche número tres, el bogie número dos es el que sale de la vía, por eso es un percance de vía, no es un descarrilamiento, porque solamente es un bogie del coche tres el que se sale”, explicó.
El general detalló que “al salirse, que sale queda ligeramente recostado con el MC1 uno con el tren 307 que estaba parado, entonces por eso es que se ve inclinado y el tren este el coche número cuatro queda sobre la vía dos completamente, no sale de la vía, queda amente posicionado”.
«La maquinista, al sentir el jalón, aplica el freno de emergencia inmediatamente y detiene el tren, dijo.
No se reportaron afectaciones, pues elementos de la Guardia Nacional evacuaron los trenes en siete minutos, con ayuda de escaleras de emergencia.
«No hubo afectación en los servicios del día. No interrumpimos. Hubo un retraso exactamente de 45 minutos», añadió.
Los pasajeros recibieron atención tras bajar del tren, y se les ofrecieron alternativas para llegar a su destino, particularmente autobuses. Sin embargo, algunos prefirieron esperar a que se restableciera el servicio.
«Una mujer de nombre Amanda me dice ‘yo tengo que volar a Brasil y necesito llegar al aeropuerto de Cancún’. Ella ha utilizado el tren para viajar en varias ocasiones y siempre he llegado a tiempo, estaba desesperada, la llevamos al aeropuerto de Cancún y llegó con 40 minutos de anticipación, y afortunadamente se fue porque si no hubiera tenido que pagar una penalidad de 35 mil pesos», relató.
También se dio aviso a la Fiscalía General de la República, que envió un grupo de peritos para evaluar la situación.
Además, una trabajadora que ayudó con la evacuación pese a sus 20 semanas de embarazo fue llevada a un hospital del IMSS, donde permanece estable.
Lozano Águila añadió que para garantizar que no se repita una situación similar, se colocó una sujeción mecánica llamada brida en los aparatos de vía, para evitar el movimiento anómalo o no autorizado.
“Porque con los motores de aguja, los motores de aguja que son cinco en un cambio de vía, empujan la aguja y la colocan, la acoplan en la vía y aseguran de manera mecánica que no se mueva.
“Por esa razón los trenes pasan con seguridad, aquí lo que pasó es que los cinco motores de aguja se accionaron para regresar la aguja durante el paso del tren a posición de desviada y por eso es que se desvían esos dos coches, solamente se salió de la vía un bogie”, apuntó.
