El Departamento de Justicia dio un paso legal y políticamente trascendental al presentar cargos criminales federales contra el ex Presidente Donald Trump, según múltiples personas familiarizadas con el asunto, después de una extensa investigación sobre su manejo de documentos clasificados que se llevó consigo al abandonar el cargo y luego obstruir los esfuerzos del Gobierno por recuperarlos.
La acusación, presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en Miami, es la primera vez en la historia estadounidense que un ex Presidente enfrenta cargos federales. Coloca a la nación en una posición extraordinaria, dada la condición de Trump no sólo como ex jefe de estado, sino también como el favorito para la nominación presidencial republicana de 2024 para enfrentarse al Presidente Joe Biden, cuya Administración ahora buscará condenar a su potencial rival.
«La corrupta Administración de Biden ha informado a mis abogados que he sido acusado, aparentemente por el engaño de cajas», dijo Trump en una publicación en su plataforma Truth Social.
No se sabe qué cargos específicos enfrenta el ex Presidente. Una persona informada sobre el asunto dijo que hay siete cargos.
Se espera que Trump se entregue a las autoridades en Miami el próximo martes, según una persona cercana a él y su propia publicación en Truth Social.
La acusación se remonta al final del mandato de Trump en enero de 2021, cuando los documentos, muchos de los cuales se decía que estaban en la residencia de la Casa Blanca, se empaquetaron en cajas junto con ropa, regalos, fotos y otros materiales, y se enviaron a Mar-a-Lago.
En agosto pasado, agentes federales llegaron a Mar-a-Lago para realizar una búsqueda que arrojó material que Trump no había entregado.
El Departamento de Justicia ha cuestionado repetidamente el nivel de cooperación de Trump con los esfuerzos para recuperar los archivos, diciendo que había recuperado más de 100 documentos que contenían marcas clasificadas.